Texto Bíblico
1 Samuel 2: 12-36 NVI
Perversidad de los hijos de Elí
“12 Los hijos de Elí eran unos perversos que no tomaban en cuenta al SEÑOR. 13 La costumbre de estos sacerdotes era la siguiente: Cuando alguien ofrecía un sacrificio, el asistente del sacerdote se presentaba con un tenedor grande en la mano y, mientras se cocía la carne, 14 metía el tenedor en la olla, en el caldero, en la cacerola o en la cazuela; y el sacerdote tomaba para sí mismo todo lo que se enganchaba en el tenedor. De este modo trataban a todos los israelitas que iban a Siló. 15 Además, antes de quemarse la grasa, solía llegar el ayudante del sacerdote para decirle al que estaba por ofrecer el sacrificio: «Dame carne para el asado del sacerdote, pues no te la va a aceptar cocida, sino cruda.» 16 Y si el hombre contestaba: «Espera a que se queme la grasa, como es debido; luego podrás tomar lo que desees», el asistente replicaba: «No, dámela ahora mismo; de lo contrario, te la quito por la fuerza.» 17 Así que el pecado de estos jóvenes era gravísimo a los ojos del SEÑOR, pues trataban con desprecio las ofrendas que le pertenecían.
18 El niño Samuel, por su parte, vestido con un efod de lino, seguía sirviendo en la presencia del SEÑOR. 19 Cada año su madre le hacía una pequeña túnica, y se la llevaba cuando iba con su esposo para ofrecer su sacrificio anual. 20 Elí entonces bendecía a Elcaná y a su esposa, diciendo: «Que el SEÑOR te conceda hijos de esta mujer, a cambio del niño que ella pidió para dedicárselo al SEÑOR.» Luego regresaban a su casa.
21 El SEÑOR bendijo a Ana, de manera que ella concibió y dio a luz tres hijos y dos hijas. Durante ese tiempo, Samuel crecía en la presencia del SEÑOR. 22 Elí, que ya era muy anciano, se enteró de todo lo que sus hijos le estaban haciendo al pueblo de Israel, incluso de que se acostaban con las mujeres que servían a la entrada del santuario. 23 Les dijo: «¿Por qué se comportan así? Todo el pueblo me habla de su mala conducta. 24 No, hijos míos; no es nada bueno lo que se comenta en el pueblo del SEÑOR. 25 Si alguien peca contra otra persona, Dios le servirá de árbitro; pero si peca contra el SEÑOR, ¿quién podrá interceder por él?» No obstante, ellos no le hicieron caso a la advertencia de su padre, pues la voluntad del SEÑOR era quitarles la vida.
26 Por su parte, el niño Samuel seguía creciendo y ganándose el aprecio del SEÑOR y de la gente.”
Reflexión
Ejemplo a seguir
Conocer al Señor implica tener una relación íntima y personal con Él, reconocer su dominio sobre nuestra vida y comprender que sin obediencia y fe es imposible agradarle. Servirle es un verdadero privilegio y Él espera que lo hagamos con responsabilidad y honestidad.
Es nuestro ejemplo lo que hará que otros lleguen a los pies del Señor. Al interior de las Iglesias existen creyentes que hacen lo contrario a lo que el Señor ordena; son insensibles al dolor de su hermano, indiferentes ante las necesidades de las otras personas, van a la iglesia a nutrirse ellos, pero son incapaces de compartir de Cristo a otros que aún no lo conocen; sonríen y son aparentemente santos y espirituales en la iglesia pero en sus trabajos y en sus hogares son necios e insensatos; Congregarse es para ellos sólo un requisito social haciéndose acreedores del título de “hermanos domingueros”.
Déjame decirte que la aversión que hoy existe hacia el cristianismo, no es más que el resultado de los malos ejemplos, la hipocresía, la mentira y el famoso “Predica pero no aplica”, que los no creyentes ven en nosotros continuamente.
Nuestra insensatez será nuestra ruina. No hablo únicamente de aquella que se refleja a través de las ofensas que proferimos a diario contra nuestros semejantes, sino de las ofensas que lanzamos contra nuestro Dios, al ignorar sus mandatos, hacer caso omiso a lo que se nos dice a través de su palabra y actuar contrario a lo que su voluntad nos indica.
En éstos tiempos percibimos una justicia permisiva. Inocentes pagando penas muy largas en las cárceles y culpables que caminan por las calles como si nada. Pero la Justicia de Dios no se equivoca y tarde o temprano llega para confirmarnos que ante sus ojos no hay nada que pueda quedarse en lo secreto.
¿Crees que saldrás aprobado porque algunos de los que te rodean te celebran lo que haces? ¡No es así!. El Señor ha visto, oído y juzgado, y así mismo, recibirás directamente de Él lo que mereces por tus continuas faltas de respeto y no comportarte con la integridad y rectitud con la que un hijo de Dios debe actuar. En tu decisión está cambiar el rumbo y rectificar el camino, aún estás a tiempo…
Alabanza Sugerida Canción:
Ven te necesito – Jesús Adrián Romero y Lilly Goodman
Ver video aquí: http://bit.ly/2buPn65
Oremos
Señor, mi mayor deseo es agradarte a ti y no a los hombres. Amado padre celestial, gracias porque me permites hoy ser tu servidor(a). Ayúdame a ver con claridad el camino que debo seguir; haz de mí una persona íntegra en mi hablar y en mi conducta, para que otros te vean reflejado en cualquier lugar en donde me encuentre. Que no sea yo quien diga que soy cristiano, sino que mis acciones hablen por mí, que pueda ser un ejemplo a seguir porque me parezco cada día más a tu hijo. Te amo, te bendigo y te necesito hoy y siempre. En el nombre de Jesús, amén.