TEXTO BÍBLICO

Proverbios 24: 19; 21-16; 21-22   (NVI)
“24 No envidies a los malvados,
ni procures su compañía;
2 porque en su corazón traman violencia,
y no hablan más que de cometer fechorías.

5 El que es sabio tiene gran poder,
y el que es entendido aumenta su fuerza.
6 La guerra se hace con buena estrategia;
la victoria se alcanza con muchos consejeros.

7 La sabiduría no está al alcance del necio,
que en la asamblea del pueblo[a] nada tiene que decir.

8 Al que hace planes malvados
lo llamarán intrigante.
9 Las intrigas del necio son pecado,
y todos aborrecen a los insolentes.

10 Si en el día de la aflicción te desanimas,
muy limitada es tu fortaleza.

11 Rescata a los que van rumbo a la muerte;
detén a los que a tumbos avanzan al suplicio.
12 Pues aunque digas, «Yo no lo sabía»,
¿no habrá de darse cuenta el que pesa los corazones?
¿No habrá de saberlo el que vigila tu vida?
¡Él le paga a cada uno según sus acciones!

13 Come la miel, hijo mío, que es deliciosa;
dulce al paladar es la miel del panal.
14 Así de dulce sea la sabiduría a tu alma;
si das con ella, tendrás buen futuro;
tendrás una esperanza que no será destruida.

15 No aceches cual malvado la casa del justo,
ni arrases el lugar donde habita;
16 porque siete veces podrá caer el justo,
pero otras tantas se levantará;
los malvados, en cambio,
se hundirán en la desgracia.

21 Hijo mío, teme al Señor y honra al rey,
y no te juntes con los rebeldes,
22 porque de los dos recibirás un castigo repentino
¡y quién sabe qué calamidades sobrevendrán!”

REFLEXIÓN

El caos presente en el mundo

Es complejo ver tanto caos en el mundo; ausencia de Dios en los gobernantes, pobreza extrema, dolorosas guerras en dónde los niños son las principales víctimas, mujeres asesinadas por sus ex-parejas, familias enteras exterminadas por mentes invadidas de perversidad. Es tan real Dios en nuestras vidas, como lo es satanás; enemigo cruel y despiadado, que intentará destruir con todas sus fuerzas la creación del Señor.

Nos encontramos en medio de una guerra espiritual, que ya tiene un vencedor…Dios. Tenemos armas poderosas para derribar a nuestro enemigo (oración, Biblia y ayuno), disposición e ímpetu para construir bondad, amor y verdad marcando la diferencia, en una sociedad sumida en la tristeza y el egoísmo de los intereses individuales; sin embargo, en ocasiones olvidamos nuestra responsabilidad de hacer frente a las artimañas del diablo y nos dejamos seducir y empujar en las trampas que él muy cuidadosa y pacientemente ha preparado para nosotros.

Estar alertas, huir y resistir; alejarse de las malas compañías, de las personas tóxicas, de compaginar descaradamente con el pecado como cuando jugamos con candela pensando que ésta no nos quemará; discernir y ser sabios a la hora de elegir las batallas que hemos de librar; cerrarle la puerta al diablo a través de la obediencia a Dios; ser radicales y no permisivos; lo anteriormente descrito, son las mejores opciones que podemos tomar. De nuestro buen juicio, depende nuestra paz y tranquilidad.

 

No es en nuestras fuerzas que lograremos derrotar a satanás; es de la mano del Señor, con una buena estrategia espiritual que te permita permanecer conectado con las cosas del cielo y no con las de la tierra, que lograrás triunfar. Dios nos conoce muy bien y así mismo, por ser juez justo y fiel, nos recompensará por nuestras acciones.

 

Alabanza sugerida

Canción: Por mi murió – Marco Barrientos

Ver video aquí: https://bit.ly/2IHWWEp

OREMOS

Me duele el corazón cada vez que permito que haya maldad a mi alrededor y observo el daño que hace y decido no intervenir. Perdóname Señor, por negarte con mis acciones faltas de sabiduría. Revísteme hoy con tu armadura poderosa; contigo a mi lado, me siento más fuerte que nunca. Satanás está vencido y no tiene poder sobre mí o mi familia. Amado Señor, habita en mi mente y mi corazón y reina desde ese lugar, fortalécete en mis debilidades y lléname de tu paz. En el nombre de tu hijo amado Jesús, amén.