TEXTO BÍBLICO

Salmos 134 (NVI)
Cántico de los peregrinos.

“134 Bendigan al Señor todos ustedes sus siervos,
que de noche permanecen en la casa del Señor.
2 Eleven sus manos hacia el santuario
y bendigan al Señor.
3 Que desde Sión los bendiga el Señor,
creador del cielo y de la tierra.”

REFLEXIÓN

Guardando las apariencias

A menudo, los cultos se convierten en transformadores temporales de las personas. Afuera de la iglesia, nos comportamos de una manera y delante de los pastores, líderes y hermanos en la fe, somos un dechado de virtudes, aparentamos que no rompemos un plato y nos dejamos ver piadosos y cumplidores de la palabra de Dios.

Podemos esconder nuestras actitudes rudas, irrespetuosas y egoístas de quienes no comparten nuestra cotidianidad, pero de nuestra familia cercana y de Dios ¡NO!

Para agradar a Dios, debemos dar testimonio de santidad e integridad en todo lo que hagamos y para que nuestro hogar sea un lugar que honre al Señor, debemos propender por ser coherentes en donde nos encontremos con la fe que decimos profesar, porque cuando hacemos lo contrario, es como si le restáramos credibilidad y fuerza a las enseñanzas de nuestro Dios, a fin de garantizar nuestro bienestar.

Crees que nadie te ve y sueles decir que no pueden juzgarte porque no conocen el contexto de las cosas, pero Dios está ahí contigo, conoce la situación, tus emociones y motivaciones para responder de la manera que lo haces y también conoce de primera mano el daño que causas con tus palabras y acciones cargadas de violencia y resentimiento y le duele el tener que impartir disciplina a causa de tu desobediencia.

El tema no es la molestia e incomodidad que nos causan otras personas, podemos enojarnos, finalmente somos seres humanos; pero que bueno poder dar a conocer nuestro punto de vista de una manera amable, sin darle lugar a los insultos, las humillaciones o el sarcasmo porque al final, muy seguramente tendremos que pedir perdón.

Recibir palabra en la iglesia, es solo el inicio; practicar lo aprendido es el verdadero reto. Bendecir y orar por nuestras autoridades, por nuestros perseguidores, por quienes nos hacen daño, traerá mayor beneficio a nuestra vida, que optar por los actos de maldad a los que el mundo nos tiene acostumbrados.

Alabanza sugerida

Canción: Preciosa Sangre – Julio Melgar

Ver video aquí: http://bit.ly/2dQlm0i

OREMOS

Señor, te pido perdón por las veces que me he dejado llevar por mis emociones, dándole cabida a la violencia en mi vida y a un mensaje de odio que no corresponde al de amor y paz que me has transmitido día a día. Transforma mi carácter a uno apacible y suave y dame una nueva oportunidad de agradarte. Eres mi guía, mi luz, mi mayor tesoro. En el nombre de Jesus, decido ser un(a) creyente coherente con mi fe, exaltarte a través de mis palabras y mis acciones. Te amo mi Dios lindo y te necesito. Amén.