TEXTO BÍBLICO
“Pero el ejército babilonio persiguió al rey Sedequías hasta alcanzarlo en la llanura de Jericó. Sus soldados se dispersaron, abandonándolo, y los babilonios lo capturaron. Entonces lo llevaron ante el rey de Babilonia, que estaba en Riblá, en el territorio de Jamat. Allí Nabucodonosor dictó sentencia contra Sedequías, y ante sus propios ojos hizo degollar a sus hijos, lo mismo que a todos los nobles de Judá. Luego mandó que a Sedequías le sacaran los ojos y que le pusieran cadenas de bronce para llevarlo a Babilonia, donde permaneció preso hasta el día en que murió.”
REFLEXIÓN
El contexto en el cual se destaca este versículo, corresponde a la caída de Jerusalén a manos de los babilonios. El rey Sedequías ofendió al Señor a tal grado que el Señor, en su ira, echó a Jerusalén y a Judá de su presencia. Por causa de su desobediencia y rebeldía, Jerusalén fue sitiada por Nabucodonosor, el templo del Señor destruido y las murallas que rodeaban la ciudad fueron derribadas. Los babilonios quebraron las columnas de bronce del templo que Salomón había construido para Dios y se llevaron todo ese bronce a Babilonia.
El rey Sedequías pudo escapar, pero fue abandonado por su ejército y finalmente, fue apresado nuevamente. Sus hijos fueron degollados ante sus ojos, al igual que los nobles de Judá, y después de presenciar la trágica escena, le sacaron los ojos y encadenado, permaneció preso hasta su muerte.
Cada decisión y acción tiene consecuencias que afectan a las personas a nuestra alrededor. No podemos esperar bendición cuando actuamos de manera contraria a la voluntad de Dios, ni podemos pretender que Él es ciego y sordo y no se da cuenta de lo que pensamos, decimos, sentimos o hacemos. Tenemos un Dios misericordioso que nos cuida, pero llega un momento en nuestra vida, en la que necesitamos tocar fondo para valorar su obra en nuestra existencia.
Adicionalmente, no hay muros ni columnas que puedan proteger y sostener a aquellos de quienes Dios aparta su mirada. Por tal motivo, debemos reflexionar sobre como estamos viviendo el regalo de la vida que Él nos da; analizar si con nuestro testimonio, Dios se deleita o ,por el contrario, somos tan ofensivos que Él prefiere mirar hacia otro lado, para evitar más dolor y decepción.
Del pecado sobreviene la ruina. Podemos ser tentados a fallar, finalmente ese es el trabajo de Satanás, hacernos caer; pero nos fue concedido el poder y autoridad para decir “no” a todo aquello que signifique caminar sin el Señor. Tenemos la oportunidad de actuar conforme a su voluntad y aunque pareciera placentero hacer lo contrario, renunciar tajantemente a lo que ponga en riesgo nuestra relación personal con Dios.
Somos nosotros quienes elegimos la vida o la muerte en las circunstancias que enfrentamos y así mismo, recibiremos de lo que hayamos dado en este mundo. De esto se trata la reciprocidad que acompaña la ley de la siembra y la cosecha de la que hemos sido partícipes al ser llamados hijos de Dios.
Alabanza sugerida
Canción: Murallas // Gateway Worship Español (con Funky, Josh Morales y Coalo Zamorano)
Ver video aquí: https://www.youtube.com/watch?v=5Y302LuQ25I
OREMOS
Padre amado, guíame en mis decisiones, dame sabiduría y permíteme bendecir y no maldecir a quienes me rodean. Límpiame completamente y hazme consiente de mi pecado antes de que caiga en la tentación de fallarte. Protege nuestra relación personal de mi propia necedad y jamás apartes tu mirada de mí. Te necesito Señor, fortalécete en mis debilidades, sé mi fuerza y mi salvación. En el nombre de Jesús te doy gobernanza sobre mi existencia, mi familia, mi trabajo y mis relaciones, amén y amén.