TEXTO BÍBLICO

Salmos 119:25-40 NVI

“25 Postrado estoy en el polvo;
dame vida conforme a tu palabra.
26 Tú me respondiste cuando te hablé de mis caminos.
¡Enséñame tus decretos!
27 Hazme entender el camino de tus preceptos,
y meditaré en tus maravillas.
28 De angustia se me derrite el alma:
susténtame conforme a tu palabra.
29 Manténme alejado de caminos torcidos;
concédeme las bondades de tu ley.
30 He optado por el camino de la fidelidad,
he escogido tus juicios.
31 Yo, Señor, me apego a tus estatutos;
no me hagas pasar vergüenza.
32 Corro por el camino de tus mandamientos,
porque has ampliado mi modo de pensar.

33 Enséñame, Señor, a seguir tus decretos,
y los cumpliré hasta el fin.
34 Dame entendimiento para seguir tu ley,
y la cumpliré de todo corazón.
35 Dirígeme por la senda de tus mandamientos,
porque en ella encuentro mi solaz.
36 Inclina mi corazón hacia tus estatutos
y no hacia las ganancias desmedidas.
37 Aparta mi vista de cosas vanas,
dame vida conforme a tu palabra.[b]
38 Confirma tu promesa a este siervo,
como lo has hecho con los que te temen.
39 Líbrame del oprobio que me aterra,
porque tus juicios son buenos.
40 ¡Yo amo tus preceptos!
¡Dame vida conforme a tu justicia!”

REFLEXIÓN

Obediencia, justicia y reparación

La premisa es sencilla, en la obediencia hay bendición. Podemos elegir agradar al mundo gobernado por satanás o agradar a Dios de pensamiento, palabra, acción u omisión, en virtud de su amor incondicional y protección desmedida.

Podrías decirme…pero Lilo, si Dios nos ama tanto, ¿Por qué permite tanta maldad en el mundo? ¿Por qué sufrimos? ¿Por qué estamos expuestos a resbalar y tener que enfrentar pruebas tan duras como una enfermedad, un divorcio, la pérdida de un ser querido o la escasez económica? y yo puedo decirte que cuando amamos al Señor y nos mantenemos firmes en sus preceptos, TODO lo que nos sucede es por nuestro bienestar y tarde o temprano entenderemos lo que Él en su sabiduría quiere mostrarnos en medio de la tormenta que estamos enfrentando.

Si fijamos la mirada en el problema, terminaremos por sucumbir ante el oprobio y la opresión de satanás intentando vernos postrados ante la derrota, la tristeza, la angustia y la desesperación; su objetivo será el que renunciemos a lo que el Señor nos ha concedido sin haber librado la batalla, es él quien hace que el espíritu de cobardía se apodere de lo que ya nos fue concedido y nos robe la paz y la esperanza de tiempos mejores, encalleciendo nuestra conciencia y bloqueando nuestra mente a la voz del Señor, quien grita desesperadamente que no debemos temer, porque Él jamás ha apartado su mirada de cada uno de nosotros.

Pon en una balanza todo aquello que hoy te domina. Reflexiona sobre lo que ha sido tu vida hasta ahora; si honras a Dios con tus decisiones; analiza por qué insistes en mantenerte en esclavitud, sometido(a) a lo que te impide ser feliz, y entiende que los tiempos de Dios son distintos que los nuestros y que cuando le damos el timón del barco de nuestra vida, Él toma el control para llevarnos a puerto seguro.

Sé agradecido por lo que tienes y deja de quejarte por lo que no tienes, valora tus bendiciones y no las desprecies. Dios es un Dios de oportunidades, justo y fiel, nuestro deber es creer y confiar…¿Lo haces dudando con el corazón?…¡Piénsalo y cambia tu manera negativa de pensar!

Alabanza sugerida

Canción: A Dios le agrada – Isabelle Valdez

Ver video Aquí: http://bit.ly/2mUZpEp

OREMOS

Tengo miedo Señor, a fracasar en mis intentos de agradarte; ten en cuenta mi esfuerzo y cuando lo haga mal, perdóname por favor. Padre amado, quiero demostrarte con mi obediencia cuánto te amo y en eso pienso cada día, pero fácilmente me dejo llevar de mis emociones y termino por ofenderte. Estoy arrepentido(a) por lo que he hecho o dicho que te ha disgustado, me siento avergonzado(a) y te pido pases por alto mis faltas y me ayudes a volver a tus caminos rápidamente. Te necesito mi Dios, lléname de tu presencia. En el nombre de Jesús, amén y amén.