TEXTO BÍBLICO

Salmos 70

Al director musical. Petición de David.

“70 Apresúrate, oh Dios, a rescatarme;
¡apresúrate, Señor, a socorrerme!
2 Que sean avergonzados y confundidos
los que procuran matarme.
Que retrocedan humillados
todos los que desean mi ruina.
3 Que vuelvan sobre sus pasos, avergonzados,
todos los que se burlan de mí.
4 Pero que todos los que te buscan
se alegren en ti y se regocijen;
que los que aman tu salvación digan siempre:
«¡Sea Dios exaltado!»

5 Yo soy pobre y estoy necesitado;
¡ven pronto a mí, oh Dios!
Tú eres mi socorro y mi libertador;
¡no te demores, Señor!

REFLEXIÓN

Es mi papá y me ama

¿Por qué no pedirle a Dios, si es nuestro papá y nos ama? Si estamos en angustia y nos sentimos perseguidos, la mejor opción es acudir a Él, quien nos puede conceder paz y aplacar a nuestros adversarios. Si hemos hecho bien las cosas y actuado con honestidad, si hemos sido obedientes y tenemos en cuenta sus palabras, ¿por qué permanecer avergonzados?

Su ayuda salvadora es segura y eficaz. Cuando estamos débiles nos fortalece. Cuando nos sentimos perdidos, amplia nuestro horizonte, nos permite ver un propósito en cada prueba y una recompensa de cada esfuerzo.

Recuerda que no estás solo(a), créelo. El Señor te da la mano y te sostiene en la larga travesía por éste desierto que amenaza con hacerte desfallecer. Tu sed de amor y de tranquilidad será saciada, encontrarás un nuevo aliento y renovarás tus fuerzas…al acercarte a Él, ¡lo lograrás!

Te concede libertad, los pensamientos que te atan a emociones negativas, son tu más pesada carga en éstos momentos; pero con valentía podrás conquistar tus sueños, Él es tu guía y tu respaldo. Prometió estar a tu lado y hasta ahora lo ha cumplido, ¿acaso no lo ves?…

Alabanza sugerida

Canción: Seguro – Miguel Balboa

Ver video Aquí: http://bit.ly/1zcT32i

OREMOS

En tus manos estoy Señor. Te pido que me des la fuerza y la valentía, para enfrentar mis pruebas y salir victorioso(a) en mi avanzar por éste mundo. Eres mi fortaleza y refugio seguro y te necesito ahora más que nunca. Señor tú dices en tu palabra que responderás mi oración y que puedo pedirte lo que necesite y me lo concederás, siempre y cuando me convenga y sea por  mi bienestar; hoy quiero pedirte que jamás me abandones y que no apartes tu mirada de mí y de mi familia. Sé que te he fallado de muchas formas y te pido perdón, ven a rescatarme y dame de tu paz que sobrepasa todo entendimiento, porque siento que no puedo más. En el nombre de Jesús, te entrego hoy mis cargas, amén.