TEXTO BÍBLICO

Isaías 48:7-11 NVI

“»Desde ahora te haré conocer cosas nuevas;
    cosas que te son ocultas y desconocidas.
Son cosas creadas ahora, y no hace tiempo;
    hasta hoy no habías oído hablar de ellas,
para que no dijeras:
    “¡Sí, ya las sabía!”
Nunca habías oído ni entendido;
    nunca antes se te había abierto el oído.
Yo sé bien que eres muy traicionero,
    y que desde tu nacimiento te llaman rebelde.
Por amor a mi nombre contengo mi ira;
    por causa de mi alabanza me refreno,
    para no aniquilarte.
10 ¡Mira! Te he refinado, pero no como a la plata;
    te he probado en el horno de la aflicción.
11 Y lo he hecho por mí, por mí mismo.
    ¿Cómo puedo permitir que se me profane?
    ¡No cederé mi gloria a ningún otro!”

REFLEXIÓN

Sin sorpresas

Para Dios no es sorpresa nuestra infidelidad y rebeldía, por eso somos muy afortunados al tener un Padre perdonador, que antes de ver nuestros defectos y continuos errores, se fija en nuestro corazón, para darnos varias oportunidades de rectificar y cambiar nuestro rumbo.

Es cierto que el Señor ha sido bueno con nosotros, pero no por eso debemos mantenernos en pecado sin intenciones de mejorar nuestro estilo de vida. Es necedad retar su soberanía con nuestras muestras de desobediencia. Disciplinar es su manera de decir te amo y cuando esto sucede, es porque hemos llegado al nivel máximo de insensatez.

No subestimes al Señor. Si de lograr la gloria en tu vida se trata, Él no cederá terreno al enemigo. Antes de verte destruído y sin futuro, intervendrá para hacerte reaccionar y si es necesario pasarte por el horno de la aflicción, para que valores su obra, lo hará sin titubear.

Mantente firme, las pruebas son temporales, miden tu capacidad de entregar tus cargas y depender de Él; Los grandes retos fortalecen tu fe, producen templanza y moldean tu carácter; al final, tu mismo te asombrarás del resultado, porque todo lo que el Señor hace, es para el bien de quienes lo aman, sin excepción alguna.

Alabanza sugerida

Canción: Todos mis anhelos – Jesús Adrián Romero

Ver video Aquí: https://bit.ly/2Dndf90

OREMOS

Amado Señor, en el fuego de la prueba me siento cerca de ti. Reconozco mi insensatez y desobediencia y me someto a tu voluntad. Perdóname por ser terco(a), por no escucharte y por robarte soberanía. Continúa tu obra en mí y permíteme conocer la recompensa de las decisiones radicales en mi vida. Te bendigo y en ti guardo mi esperanza, en el nombre de Jesús, amén.