TEXTO BÍBLICO
Job 19 (NVI)
Sexto discurso de Job
«19 A esto, Job respondió:
2 «¿Hasta cuándo van a estar atormentándome
y aplastándome con sus palabras?
3 Una y otra vez[a] me hacen reproches;
descaradamente me atacan.
4 Aun si fuera verdad que me he desviado,
mis errores son asunto mío.
5 Si quieren darse importancia a costa mía,
y valerse de mi humillación para atacarme,
6 sepan que es Dios quien me ha hecho daño,
quien me ha atrapado en su red.
7 »Aunque grito: “¡Violencia!”, no hallo respuesta;
aunque pido ayuda, no se me hace justicia.
8 Dios me ha cerrado el camino, y no puedo pasar;
ha cubierto de oscuridad mis senderos.
9 Me ha despojado de toda honra;
de la cabeza me ha quitado la corona.
10 Por todos lados me destroza, como a un árbol;
me aniquila, y arranca de raíz mi esperanza.
11 Su enojo se ha encendido contra mí;
me cuenta entre sus enemigos.
12 Sus tropas avanzan en tropel;
levantan una rampa para asediarme;
¡acampan alrededor de mi carpa!
13 »Hizo que mis hermanos me abandonaran;
hasta mis amigos se han alejado de mí.
14 Mis parientes y conocidos se distanciaron,
me echaron al olvido.
15 Mis huéspedes y mis criadas me ven como a un extraño,
me miran como a un desconocido.
16 Llamo a mi criado, y no me responde,
aunque yo mismo se lo ruego.
17 A mi esposa le da asco mi aliento;
a mis hermanos[b] les resulto repugnante.
18 Hasta los niños me desprecian;
en cuanto me ven, se burlan de mí.
19 A todos mis amigos les resulto abominable;
mis seres queridos se han vuelto contra mí.
20 La piel y la carne se me pegan a los huesos;
¡a duras penas he salvado el pellejo![c]
21 »¡Compadézcanse de mí, amigos míos;
compadézcanse, que la mano de Dios me ha golpeado!
22 ¿Por qué me acosan como Dios?
¿No les basta con desollarme vivo?[d]
23 »¡Ah, si fueran grabadas mis palabras,
si quedaran escritas en un libro!
24 ¡Si para siempre quedaran sobre la roca,
grabadas con cincel en una placa de plomo!
25 Yo sé que mi redentor[e] vive,
y que al final triunfará sobre la muerte.[f]
26 Y, cuando mi piel haya sido destruida,
todavía veré a Dios con mis propios ojos.[g]
27 Yo mismo espero verlo;
espero ser yo quien lo vea, y no otro.
¡Este anhelo me consume las entrañas!
28 »Ustedes dicen: “Vamos a acosarlo,
porque en él está la raíz del mal”.
29 Pero cuídense de la espada,
pues con ella viene la ira justiciera,
para que sepan que hay un juez».”
REFLEXIÓN
Ten fe, todo va a estar bien
Culpar a Dios de lo que te sucede es la manera más fácil de evadir tu responsabilidad. Él te disciplina, corrige, te llama al orden, pero jamás será tu enemigo. Te ama, eres importante para Él y desea siempre lo mejor para tí. Quizás me dirás, Lilo si me ama… ¿Por qué me sucede esto? ¿Por qué sufro? ¿Por qué tanto dolor? y yo te responderé, mira en tu interior y lo sabrás.
Has fallado, cometido errores, tomado decisiones equivocadas, pero para el Señor, queda en el pasado y cuando entiendas que Él simplemente trabaja en ver cumplido su plan y propósito en ti; cuando creas que el final, será el principio de una vida en la eternidad junto a Él, tu punto de vista y análisis dará un resultado distinto, al que hasta ahora has podido ver.
Tú decides a quien creerle, a un mundo que te acusa y te señala y te pinta un futuro oscuro y desolado o a un Dios soberano, que da, que quita; pero que también redime, salva y ama incondicionalmente.
¿En verdad piensas, que eres un error de Dios?…Eres lo mejor de su creación, confía en tí, escudriña tu corazón y te conoce más que nadie en éste mundo. Sabe cuáles son tus sueños, tus anhelos más profundos, tus necesidades y espera ansioso que lo busques para extenderte sus brazos de amor y decirte, que ha estado allí contigo y ha llorado a tu lado. También conoce tus desaciertos y derrotas, y es consiente que sólo no puedes y por eso ha decidido permanecer junto a ti, aunque lo desprecies y lo ignores.
Él te protege, basta que creas que el amor es el amanecer y el atardecer a su lado, ten fe, No necesitas a nadie más y todo va a estar bien.
Alabanza sugerida
Canción: Estoy Aquí – Redimidos & Lucía Parker
Ver video aquí: http://bit.ly/1UaftId
OREMOS
Señor, perdona mi pasado y dame un presente y un futuro lleno de esperanza junto a ti. Gracias porque hoy puedo ver con claridad que has convertido mis más grandes fracasos en victorias para tu honra y gloria. No hay nada que se salga de tu control, ahora lo sé. No importa cuántas caídas tenga, si estás conmigo tendré el valor de levantarme cuantas veces tenga que hacerlo. Rindo mi vida a ti y hoy te digo, que te necesito para ser feliz. En el nombre de Jesús, amén.