TEXTO BÍBLICO

“Oh Señor, ¿por qué permaneces tan distante? ¿Por qué te escondes cuando estoy en apuros? Con arrogancia los malvados persiguen a los pobres; ¡que sean atrapados en el mal que traman para otros! Pues hacen alarde de sus malos deseos; elogian al codicioso y maldicen al Señor.

Los malvados son demasiado orgullosos para buscar a Dios; parece que piensan que Dios está muerto. Sin embargo, prosperan en todo lo que hacen. No ven que les espera tu castigo; miran con desdén a todos sus enemigos. Piensan: «¡Jamás nos sucederá algo malo! ¡Estaremos para siempre sin problemas!»”.

 (Salmos 10:1-6 NTV)

REFLEXIÓN

Somos vulnerables cuando no buscamos a Dios y pensamos que no lo necesitamos para cumplir nuestras metas. Demostramos altivez cuando confiamos en nuestra propia inteligencia y creemos que nuestras habilidades y talentos bastan para sentirnos plenos y satisfechos en esta vida.

Vivimos en un mundo quebrantado, pero debemos confiar en nuestro Dios bueno, amoroso y soberano. Vivimos en el mundo, pero no le pertenecemos. Bajo esta premisa, no podemos sentirnos mejor que otros por el hecho de creer que tenemos el favor de Dios o que llevamos en nuestra espalda el letrero de “Soy Cristiano”, por el contrario, la responsabilidad es mucho más grande, al tener bajo nuestro cuidado, el nombre de Dios en cada una de nuestras acciones.

Dar testimonio de nuestra fe, denota el esfuerzo de agradar a Dios. Consultarle nuestras decisiones; orar y bendecir a quienes nos persiguen, con la seguridad de que el señor nos rescata de las personas sin escrúpulos; erradicar de nuestra vida las mentiras y la incredulidad; proteger nuestro hogar, nuestra familia y nuestra integridad, teniendo presente que Dios actúa, juzga y ejerce justo dominio en la realidad de sus hijos amados y que que seremos llamados a rendir cuentas por nuestras acciones u omisiones.

Depender del Señor es la clave del éxito en todo lo que emprendamos. Él es el dueño de todo lo que existe en esta tierra y siendo nuestro creador, sabe como potencializar nuestras habilidades y talentos. Debemos afirmar que con Él de nuestro lado, no existe nadie que pueda estar en nuestra contra; apropiarnos de la verdad al aceptar, que sin Él nada podemos lograr; y permitir que su espíritu fluya a tal punto que, a dónde vayas, el malvado sepa que llegaste, porque la luz que emanas es mucho más potente que cualquier oscuridad que él quiera esparcir. 

Alabanza sugerida

Canción: Tú dices – Twice

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OREMOS

Señor, creo y confío en que me amas y quieres lo mejor para mí. Aparta de mi el mal. Haz de mi un instrumento de amor. Fortalécete en mi vulnerabilidad y muéstrame hasta dónde puedo llegar cuando estás conmigo.Vé delante de mí a donde quiera que yo vaya y glorifícate en mis decisiones. Gracias por permanecer a mi lado. En el nombre de Jesús, amén.