«Purifícame con hisopo , y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve.  Anúnciame gozo y alegría; infunde gozo en estos huesos que has quebrantado.  Aparta tu rostro de mis pecados y borra toda mi maldad.» 
Salmos 51:7-9 NVI

En el artículo anterior hablamos de aquellos que se han sostenido firmes pero se sienten débiles con respecto a su deseo sexual hacia su pareja, ahora es el momento de hablar de las parejas que de un modo u otro nunca se les dijo como luchar o como mantenerse sin necesidad de una relación sexual antes del matrimonio.

Es claro, que el tema no es tan sencillo de manejar, que no es fácil resistirse pero que con Dios de nuestra mano, no es imposible, ahora la cuestión es que algunos no soportaron la tentación, y no los juzgamos porque en verdad entendemos lo difícil que es esta situación, pero para todos hay solución y en el artículo de hoy te daremos 4 pasos simples y sencillos, que si pones en práctica te facilitará un poco las cosas y tu manera de pensar empezará a renovarse.

Pero antes dejemos en claro que el hecho de que caigas no te da el derecho de seguirlo haciendo, Dios te diseño con un espíritu de dominio propio así que, adiós excusas.

Primero, debemos ir a la presencia de Dios y reconocer específicamente nuestra debilidad, en este caso, la inmoralidad sexual, porque Dios en tus debilidades se perfecciona (2 Corintios 12:9 NVI) Tienes el mismo derecho que cualquiera de postrarte y levantar tus manos a Dios.

Segundo, debes tener un corazón arrepentido (Lucas 15:10 NVI), Arrepentirnos es dar a nuestra vida un giro de 180 grados, tu pasado ya no vuelve más,  no miras atrás y empiezas a cambiar de hábitos para no caer.

Tercero, pídele fortaleza a Dios para no seguir cayendo en eso que le desagrada, pídele que te ayude a mantenerte firme en el mensaje de la cruz, pero no sólo de Dios depende, tu también debes creer que eres fuerte. En el artículo anterior dimos unos pasos para permanecer firmes, te invitamos a que los leas y los pongas en práctica (https://conectadosconcristo.com/que-es-esto-que-estoy-sintiendo/)

Cuarto, da gracias en todo tiempo, en todo lugar, en todo momento, dale gracias a Dios por la victoria que te ha regalado, ya eres nuevo, el Señor te ha limpiado, empieza a creer.

«Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva la firmeza de mi espíritu.  No me alejes de tu presencia ni me quites tu santo Espíritu.  Devuélveme la alegría de tu salvación ; que un espíritu obediente me sostenga.  Así enseñaré a los transgresores tus caminos , y los pecadores se volverán a ti.»
(Salmos 51:10-13 NVI)

Escrito para www.conectadosconcristo.com

Gonzo y Geral